L’Olivera presenta el vino conmemorativo de su 50 aniversario, un coupage de macabeos de diferentes elaboraciones y diferentes añadas que resume la trayectoria de la entidad

No se entiende la celebración de los 50 años de L’Olivera sin lo que mejor sabemos hacer: el vino. Por este motivo, este aniversario llega acompañado de su vino conmemorativo. El vino de los 50 años es un monovarietal de macabeo que resume el conocimiento de L’Olivera en la elaboración de vinos singulares con esta variedad que, desde los inicios, nos ha dado identidad. Un monovarietal de macabeo que es, en realidad, un coupage de macabeos diferentes, con diferentes elaboraciones y también, de diferentes añadas, con el objetivo de recoger en el vino, gotas de historia de estos 50 años.

Es, en sí mismo, un resúmen de como hemos trabajado el macabeo desde los inicios hasta la actualidad. Por eso, el coupage incluye una parte (27%) de macabeo fermentado y criado en barrica, que evoca la tradición; un 40% de macabeo que ha hecho la crianza con nuevos materiales con los que estamos experimentando en los últimos años, como el cemento; un 30% de macabeo brisado, un método tradicional con el que también experimentamos actualmente y, finalmente, un 3% de macabeos de distintas añadas (1993, 2000, 2009 y 2015).

vi-50-anys-olivera
vi-50-anys-olivera

Un diseño artesanal para una edición muy limitada

Experimentación y tradición. Una amalgama dentro de una botella de vino que es una edición muy limitada de tan solo 1000 botellas y 50 magnums. Desde la bodega hemos intentado que cada botella sea una pequeña obra de arte, única y delicada. Por eso, el vino lleva una etiqueta especial, obra del diseñador catalán Claret Serrahima, colaborador de L’Olivera desde sus inicios. Junto con su hija, Ariadna Serrahima, han ideado una etiqueta que enlaza también el vino con la artesanía, ya que está impresa utilitzando la tipografía «Super Veloz», creada en 1942, y se ha impreso, una a una, en una imprenta mecánica Minerva Heidelberg de aspas. Un trabajo minucioso que que ha llevado a cabo en la imprenta L’Automàtica, de Barcelona, de las pocas que aún quedan en Catalunya con este tipo de impresión y que hace que cada etiqueta sea una pieza única.

El Vinseum acoge el acte de presentación del vino de los 50 años

Este nuevo vino de L’Olivera se ha presentado, el jueves 16 de mayo, en el Vinseum, el Museu de les Cultures del Vi de Catalunya, en Vilafranca del Penedès. El acto de presentación ha contado con la presentación del director del museo, Xavi Fornós, que ha destacado la amistad que, desde hace años, existe entre el museo y L’Olivera, que es uno de los Amigos de Honor del Vinseum. Por su parte, el vicepresidente y responsable de producción de L’Olivera, Pau Moragas, ha puesto el émfasis en las complicidades que L’Olivera ha tejido a lo largo de estos 50 años y que han hecho posible la consolidación de un proyecto de agricultura social «desde los márgenes». En el mismo sentido se ha expresado el director de L’Olivera, Carles de Ahumada, que ha destacado la importancia del macabeo en la creación de la identidad de L’Olivera recordando que «fuimos la primera bodega de la DO Costers del Segre en trabajar el macabeo, sobre todo en vinos monovarietales».

El acto de presentación ha contado también con la intervención del autor de la etiqueta, el diseñador barcelonés Claret Serrahima, colaborador de L’Olviera desde sus inicios. Junto con su hija, Ariadna Serrahima, han explicado como se ha elaborado, de forma muy artesanal, esta nueva etiqueta y han hecho un repaso de los trabajos que, durante estos años, Serrahima ha elaborado para L’Olivera. «Estoy muy contento de transmitir en las etiquetas el gran trabajo de un proyecto que te atrapa», ha dicho Serrahima.

Ha cerrado el acto la enóloga de la bodega, Clara Griera, poniendo adjetivos imposibles a un vino que ha catalogado de «experimento, un vino que nace de la marinada, de un paisaje único y del coupage de añadas históricas de macabeo». «Es dinámico como los somos nosotros. Es evolutivo, es un viraje, un punto de inflexión, como lo son, también, los 50 años de L’Olivera», ha dicho Griera, que también ha agradecido el acompañamiento del también enólogo Enric Soler en la elaboración de este vino.

El acto ha finalizado con una cata de este nuevo vino entre todos los asistentes. Antes, la presidenta de L’Olivera, Dolors Llonch, ha hecho entrega de una botella Magnum del vino de los 50 años al Vinseum, acompañada de una reproducción original de la etiqueta que ha sido pintada a mano por el propio Claret Serrahima.