Se trata de un monovarietal de Garnacha negra, ecológico y vegano, bajo la denominación de origen Costers del Segre
Después de más de 30 años elaborando vinos blancos, tintos, dulces y espumosos, L’Olivera da un paso más y ahora saca al mercado su primer vino rosado. Airós es el nombre de este nuevo vino de la bodega de Vallbona de les Monges, un monovarietal de Garnacha negra, de certificación ecológica y vegana, que recoge la experiencia adquirida por L’Olivera en la elaboración de esta variedad en vinos tintos, demostrando su versatilidad para elaborarla, ahora, en un vino rosado. Un vino que es la expresión genuina de esta variedad, muy adaptada en la Vall del Corb y que constituye, ya, un rasgo identitario de esta subzona de la DO Costers del Segre.
Airós es un vino sutil y delicado, con un perfil especiado original de una Garnacha de cierta altura (600 metros) procedente de diferentes viñedos de la Vall del Corb, en Costers del Segre. A nivel enológico, es fruto de dos elaboraciones diferentes: por un lado, parte de la Garnacha se prensa directamente con una ligera maceración en la propia prensa. Por otro lado, la otra parte de la Garnacha es fruto de un sangrado de un depósito de pigeage a las 48 horas. Después, en ambos casos, el mosto fermenta en depósito a temperatura controlada hasta el momento de su embotellado.
Airós es un perfil de rosado pálido y brillante. Sutil y elegante en nariz, donde sobresalen los aromas de fresas silvestres y cerezas rojas, notas anisadas y un punto de crema pastelera. Fresco y ágil, el Airós es perfecto para acompañar platos informales como la pizza y la pasta, o los entremeses fríos.
El vino ya se puede comprar a través de la tienda online de L’Olivera, en la bodega e L’Olivera en Vallbona de les Monges y Can Calopa (Barcelona) y también en tiendas especializadas.
Airós: el nombre y la imagen
Airoso (en catalán «Airós») como los atardeceres de marinada en los viñedos de Vallbona de les Monges. Porqué «airós» significa ventoso, aireado, refrescado. Esta primera acepción del diccionario nos traslada al ambiente ventilado que proporciona el viento que viene de mar y que es muy característico en la subzona Valls del Riu Corb. Un viento que refresca los atardeceres cálidos de verano y que, a nivel agronómico, favorece la buena maduración de la uva.
Pero el nombre también otorga al vino un carácter o personalidad humana: una persona airosa es alguien gentil, alegre, animado. . Un carácter que enlaza con el perfil de vino que es el Airós: ágil, fresco, alegre.
Este vino, además, se integra en la família de vinos jóvenes de L’Olivera, que representan, cada uno, un carácter: «Seré» (sereno), «Tossudes» (tozudas) y «Airós» (airoso). Tres perfiles, tres caracteres.
La imagen de la etiqueta es obra del estudio de diseño de Barcelona Clase_bcn, con quién L’Olivera trabaja desde los inicios. Una etiqueta sutil y delicada, como el vino, que dibuja texturas y evoca sensaciones: la del aire, la de la vaporosidad. Una idea abstracta que es una representación de la ligereza, con sencillez y simplicidad, que une el perfil del vino con su imagen.